Como Conseguir Aumentar la Pérdida de Peso Comiendo Bayas

Fresas, frambuesas, arándanos, moras ... Estos frutos pueden ser pequeños, pero están llenos de energía. Las bayas añaden un toque de verano para tus menús en la cocina y simplemente son irresistibles y deliciosos como también una gran comida saludable. Pero más que eso, las bayas proporcionan un montón de nutrientes y pueden ayudarte a conseguir aumentar la pérdida de peso y obtener la figura que siempre has querido tener. Sigue leyendo, si quieres saber cómo estas frutas pueden ayudarte a bajar de peso y reducir barriga. Y como bonus track. Os dejo tres recetas con sabor a fruta que os van a venir muy bien.

Poder nutricional

Las bayas obtienen su increíble color de las antocianinas, que son parte de la familia de losflavonoides englobadas en las sustancias conocidas como fitoquímicos. Las antocianinas son conocidas por ser potentes antioxidantes. Estos neutralizan los radicales libres y por lo tanto evitan la producción de dichos radicales libres, son un potente antioxidante. Un suministro adecuado de antioxidantes es especialmente importante cuando quieres entrenar a un elevado rendimiento y salir a correr regularmente, ya que evitas el estrés oxidativo en tu cuerpo producido por dicho ejercicio y que se ha relacionado con numerosas enfermedades. Investigadores noruegos han encontrado que las bayas, a diferencia de algunas otras frutas, muy altos niveles de antioxidantes. Por lo que son una verdadera fuente inagotable de nutrición saludable y muy estimulantes del sistema inmunológico.

Una gran fuente de vitaminas y fibra

Las bayas son ricas en vitaminas y minerales. Por ejemplo, las grosellas negras son lo mejor cuando se trata de conseguir vitamina C. Contienen más de 170 mg por 100 g, que es casi el doble de nuestras necesidades diarias de esta vitamina. Por lo tanto, un puñado al día te da casi más de lo que realmente necesitas.

Además, este tipo de fruta es una fuente importante de fibra. La fibra mantiene la sensación de saciedad por más tiempo y permite que el nivel de azúcar en la sangre aumente ligeramente y lentamente. Esto ayuda a evitar los picos de azúcar en la sangre y por lo tanto poner fin a los antojos terribles de helados y dulces. Y seamos honestos: por ejemplo las frambuesas frescas son lo suficientemente dulces, ¿verdad?

Sobre este último punto de la fibra, podéis consultar un artículo donde explico en detalle lo importante que es esta sustancia esencial para nuestro organismo. De hecho el título ya lo explica todo, “el ingrediente número uno para perder peso”.

Resumiendo, debes optar por una dieta alta en fibra, lo que, en combinación con entrenamientos regulares, será tu potencial quema grasa para perder peso y reducir barriga.

Golosinas bajas en calorías

Al contrario de otras frutas, las bayas encajan muy bien con una dieta baja en carbohidratos. Y también son bajas en calorías. Un ejemplo, un plátano tiene alrededor de 100 kcal y 20 g de hidratos de carbono, mientras que 100 g de fresas tiene alrededor de 30 kcal y sólo 6 g de hidratos de carbono. Si quiere conseguir aumentar la pérdida de peso y estás buscando una merienda baja en carbohidratos después del entrenamiento, puedes combinar un yogur griego bajo en grasa con fresas frescas y algo de vainilla rallada. Tiene un sabor tan dulce que no vas a necesitar nada de azúcar extra.

Perfectas para ensaladas, batidos y postres

Las bayas son muy versátiles. Especialmente en comidas dulces, así como también en platos salados, añaden un toque de sabor a fruta y una dosis extra de vitaminas. En ensaladas, son perfectas por el dulce contraste con la salsa agridulce. En batidos, las bayas consiguen un magnífico color rojo o púrpura, además lógicamente de unas propiedades saludables de primer nivel y como no, de sabor. ¿Estáis preparados para una oleada de sabor? A continuación, os dejo tres recetas de las más saludables y muy fáciles de preparar para una buena dieta equilibrada.

Ensalada de espinacas con arándanos, aguacate y queso feta

Ingredientes para dos personas:

            2-3 puñados de espinacas frescas.
            250 g de arándanos frescos.
            1 aguacate.
            1 paquete de queso feta (en cubitos).
            25 g de piñones.
            1 chalota (picada).
            2 cucharadas de vinagre balsámico blanco.
            1 cucharadita de mostaza.
            Un chorrito de aceite de oliva.
            Sal y pimienta.

Preparación: Mezcla la chalota picada, vinagre, mostaza, aceite de oliva, sal y pimienta para formar el aderezo. Lavar las espinacas y los arándanos y secar el agua. Cortar el aguacate por la mitad, retirar la semilla y luego cortarlo en finas rodajas. Añadir todo en un bol y mezclar cuidadosamente los ingredientes con el aderezo. Por último, tostar los piñones en una sartén sin aceite. Hay que tener cuidado de no quemarlos (que puede suceder). Servir la ensalada en dos platos y espolvorear con cubitos de queso feta y piñones en la parte superior. Disfrutar de tu ensalada! También puedes sustituir queso feta por queso de cabra.

Pastel de bayas caliente

Ingredientes para un bol de tamaño medio:

                250 g de bayas mezcladas.
                Media ralladura de limón orgánico.
                50 g de avena.
                4 cucharadas de almendras ralladas.
                2 cucharaditas de aceite de coco.
                2 cucharaditas de jarabe de arce.
                Vainilla.
                Una pizca de sal.

Preparación: Precalentar el horno a 170 °. Mezclar las bayas con un poco de vainilla y la ralladura de limón. No dude en aplastar los granos con un tenedor para exprimir un poco el jugo. Luego combine la avena, almendras, aceite de coco, jarabe de arce, la vainilla y la sal restante. Estos son todos los ingredientes para el pastel y ahora debes poner la mezcla resultante en un pequeño plato para hornear y colocar el recipiente en el horno durante 40 minutos. Mi consejo: el pastel de bayas caliente sabe increíble con la siguiente receta de helado.

Helado vegano con frambuesas

Ingredientes para dos personas:

                    2 plátanos congelados.
                    60 g de frambuesas congeladas (también se pueden utilizar fresas o arándanos).
                    3 cucharadas de leche de coco.
                    1 cucharadita de jarabe de agave.

Preparación: Combina todos los ingredientes en un buen robot de cocina. Mezclar hasta que tenga una consistencia cremosa. Esto puede tardar varios minutos. Decora tu helado con copos de coco y frambuesas frescas.

Bueno, de nuevo hemos llegado al final del artículo y me asaltan una serie de preguntas que os hago llegar. ¿Cuáles son tus bayas favoritas? ¿Cómo prefieres comerlas? ¿Qué combinaciones crees que van mejor? Si compartes tus respuestas con todos aumentaremos el conocimiento global, al final es de lo que se trata, de compartir.

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